
Podemos titular al capítulo 16 del Evangelio de Juan como: “La victoria de Jesús”. Él está ante el momento previo a ser crucificado, sabe que su hora ha llegado, conoce los peligros y sufrimientos que le esperan a Él mismo y toma tiempo para advertir sobre los que tendrán sus discípulos en un futuro no muy lejano. Sin embargo, ante este panorama adverso vuelve una y otra vez la mirada hacia lo que viene, hacia un futuro esperanzador. Es como si durante todo el capítulo dijera: “esto malo va a pasar, pero yo haré…” Esa capacidad de conocer y confiar en un futuro de esperanza es uno de los mayores ejemplos que Jesús nos ha dejado para transitar esta vida en victoria.
“esta es la victoria que ha vencido al mundo: nuestra fe” 1 Juan 5:4
Vamos a mencionar algunos puntos de victoria que tenemos en este texto:
1. “Les he dicho estas cosas para que no abandonen su fe.” v1 NTV.
La victoria contra la incredulidad. Jesús habló lo que habló para ayudarnos a mantener la fe. Jesús no hizo promesas de bienestar terrenal, para que las adversidades no nos aparten de Él. ¿Crees en sus palabras? ¿Le crees a Él como Jesús le creyó al Padre?
2. “Para que cuando llegue la hora, os acordéis de que ya os lo había dicho” v4
La victoria sobre las malas noticias. Si estamos avisados acerca de algo malo que va a acontecer, la mala noticia pierde su fuerza, porque nos da tiempo a prepararnos. El Evangelio es una buena noticia que contrarresta las malas noticias. ¿Qué tiene más poder en tus emociones, las malas noticias o las promesas de Jesús?
3. “Él os guiará a toda la verdad” v13.
La victoria sobre el engaño. En la era de lo “fake”, Jesús nos dio la victoria a través de Su Espíritu. Muchas veces nos sentimos confundidos por no saber qué es verdad y qué no lo es. En los postreros tiempos Satanás tratará de engañar aun a los escogidos, por eso se nos dio el precioso Espíritu para que nos guíe a ver la verdad ¿Buscas la verdad del Espíritu cuando te surge una duda?
4. “Vuestra tristeza se convertirá en gozo” v20.
La victoria sobre la tristeza. Jesús fue ungido con óleo de alegría (Salmo 45:7) y tiene la autoridad para darnos de Su gozo. La depresión es una de las enfermedades “de moda”, pero Jesús prometió convertir nuestra tristeza en gozo. Toma tiempo para pensar en aquellas cosas que te entristecen y dejar que el Señor lo cambie por gozo.
5. “Y me dejaréis solo; más no estoy solo, porque el Padre está conmigo” v32.
La victoria sobre la soledad. Jesús sabía que NUNCA estaba solo porque el Padre estaba con Él. El sentimiento de soledad es un engaño del Enemigo para envolvernos en tristeza. Jesús prometió estar todos los días con nosotros hasta el fin. ¿A veces te sientes solo? Toma tiempo para orar dando gracias por la presencia de Dios en tu vida y que siempre seas consciente de ella.
6. “Yo he vencido al mundo” v33
La victoria sobre el mundo. En esta frase Jesús resume su triunfo sobre todo el sistema actual, tanto paradigmas internos como externos. Toda tentación puede ser vencida EN Cristo, porque Él ha vencido el mundo. Si hay algo en lo que no sientas libertad, toma tiempo para meditar en la victoria de Jesús y pedir ser lleno de la misma capacidad de vencer.
7. “Otra vez dejo el mundo, y voy al Padre” V.28.
El premio a la victoria. El premio de Jesús por su victoria fue el retorno al lado del Padre. Toma tiempo para agradecer que también vas en ese camino.